- Con la venta de boletos apenas se aseguraría el monto de los premios.
 
- El resto de los costos se pagarían con recursos públicos.
 
- A final, López Obrador deja a la suerte la ganancia para el Insabi.
 
Edmundo Crespo Ruiz
 
"Ya hay compromisos por mil 700 millones (de pesos) y nos faltan 15 días, o sea, vamos a pasar los dos mil millones, que con esto se aseguran los premios", Andrés Manuel López Obrador, 31 de agosto del 2020.
 
Estamos a una semana de que la Lotería Nacional celebre el sorteo de CIEN premios de 20 MILLONES DE PESOS cada uno equivalente al valor del avión presidencial, 2000 MILLONES DE PESOS. Al evaluar su éxito financiero sería injusto dejar de lado el impacto que tuvo la pandemia en la venta de boletos y asegurar que Andrés Manuel López Obrador se equivocó al decidir pasar a la historia como el mejor billetero.
 
Al 31 de agosto aún no se llegaban a vender los cachitos suficientes para cubrir los montos de los premios, los 2 mil millones de pesos, pero el optimismo del billetero López Obrador ubica la venta final en esa cifra. Seguramente esta semana, en alguna de las conferencias matutinas, nuestro líder sacará a la luz cuentas alegres, y afirmará que pese a la situación actual va a ser un buen negocio para el sector salud que "nos lo dejaron en ruinas", que hubiera sido excelente pero el coronavirus no lo permitió.
 
El resto de los costos de la realización del sorteo, como la impresión y la distribución de los boletos, la comisión del 8 por ciento a los vendedores, los impuestos de los premios (si no se van a cobrar representan una pérdida de ingresos para las finanzas), seguramente serán cubiertos con recursos públicos, pero no creo que sean contabilizados en las cuentas del presidente; por cierto, ¿cuánto vale el tiempo que él le ha destinado a la promoción?, creo que algo ha de valer.
 
Nuestro líder ya ha dejado entrever que en sus datos todo lo recaudado por la venta de los cachitos es ganancia porque los recursos para los premios ya los cubrió el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep), pero en realidad, el pasado 16 de agosto su director lo dejó muy claro: “estos recursos se destinarán para el sorteo especial 235 de la Lotería Nacional, que se celebrará, como saben, el 15 de septiembre, que es conocido este sorteo como el del avión presidencial, los recursos que se obtengan del sorteo de la lotería en donde nosotros estamos apoyando, inyectando recursos económicos, se destinarán al gasto social, se destinarán a la Secretaría de Salud”, dijo Jaime Cárdenas.
 
Pero al hacer las cuentas hay que hacer a un lado lo que aportó el Indep porque, como bien lo dijo el titular de la dependencia, es un apoyo al gasto social de la Secretaría de Salud, sólo se puso temporalmente en las arcas de la Lotería Nacional para garantizar el pago de los premios, al efectuarse el sorteo ese dinero sigue su camino original hacia gasto en salud.
 
El avión presidencial tampoco tiene nada que ver con los datos financieros del Sorteo, más allá del uso de la marca que sirvió para fortalecer la labor de venta del billetero López Obrador, basta ver el video que sacó con motivo de su segundo informe de gobierno (https://youtu.be/lLckDVvYUcY). "Estos parecían reyes, miren los lujos que se daban. Habiendo tanta pobreza, esto es un insulto, este avión lo vamos a rifar el 15 de septiembre y lo que se obtenga se va a utilizar para comprar equipo médico y atender al pueblo. Compra tu 'cachito'. Hagamos historia".
 
Este anuncio debería de ser sancionado de oficio por Profeco por publicidad engañosa y no me refiero a que volaban como reyes, me refiero a que se va a rifar el avión presidencial, perdón si los desilusioné pero ni se está rifando el avión ni se va a vender para pagar los premios.
 
Salvo que suceda un milagro y se venda antes, el 16 de septiembre la aeronave seguirá en el lugar que se grabó el video esperando un comprador; mientras, el Gobierno federal sigue pagando la renta del hangar, el mantenimiento y también el arrendamiento a Banobras. Aunque se ve complicado, si algún día se vende, Banobras primero se cobrará para finiquitar el contrato de arrendamiento y el resto, si sobra, se lo entregará al Indep.
 
Con estos números, el sorteo fue un mal negocio para Salud, hubiera sido mejor inyectarle los 2 mil millones desde que se inició la venta de los cachitos, pero el hubiera no existe y en aquel momento tampoco existía la pandemia en México, aunque tanto López Obrador como López-Gatell han insistido que se prepararon desde el inicio de año y que lo que ha pasado estaba en sus escenarios, entonces, con mayor razón, era mejor abortarlo, pero eso es otro asunto.
 
TODO QUEDA A LA SUERTE
 
Para salvar la situación, nuestro líder tuvo a bien decidir que todos los boletos no vendidos sean entregados al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), la única ganancia del sorteo para Salud serían los premios que resulten en los 2 millones de boletos no vendidos.
 
Como bien lo dijo en la conferencia matutina del 31 de agosto, el Insabi tendrá el 33 por ciento de posibilidades de ganarse premios ya que tendrá en su poder 1 de cada tres boletos emitidos, un total de 660 millones de pesos. Al final del día la ganancia va a quedar a la suerte, puede ser más o menos.
 
Si no fuera porque el actual gobierno no es como los de antes, y los funcionarios son 90 por ciento honestos y 10 por ciento experiencia, me preocuparía. Con esta novedosa decisión de López Obrador, en otros tiempos estaríamos exigiendo que se hicieran públicos antes del sorteo los números de los dos millones de boletos que se van a entregar al Insabi, porque, con eso de que muchos funcionarios del Gobierno federal y representantes populares de los partidos de nuestro líder compraron voluntariamente cachitos, no sería raro que el 16 de septiembre resultaran ganadores de varios premios, ni se levantaría ninguna sospecha.
 
Por fortuna ya se va a cerrar este capítulo del sorteo del avión presidencial, pero por desgracia creo que se pueden realizar más eventos desviando la atención y el tiempo de nuestro líder, los cuales deben ser dedicados a temas más importantes.
 
¡Hasta la próxima semana!
 
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

- La visita de López Obrador a los 3 estados del noreste, acabó por convencer a los gobernadores que es la hora de dejar la Conago y buscar otra forma de hacerse escuchar.

Por Edmundo Crespo Ruiz
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

"Resulta urgente modificar la Ley de Coordinación Fiscal para que los estados altamente productivos sigan creciendo y aportando recursos a las entidades con mayor pobreza de las que somos hermanos y compatriotas solidarios".

- Francisco Javier García Cabeza de Vaca, 28 de Agosto 2020.

Después de la gira que hizo la semana pasada nuestro líder por Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, a los tres gobernadores les quedó claro que el presidente Andrés Manuel López Obrador va a usar a sus gobernadores súbditos de Morena, perdón afines, para frenar en la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) la demanda de los 12 mandatarios de la Alianza de un reparto más justo de los recursos fiscales.

Aunque con diferentes palabras, el mensaje que llevó a los tres gobernadores, fue el mismo que dio el lunes en la conferencia matutina para resumir lo que dijo en la reunión de la Conago del 19 de agosto en San Luis Potosí: "Durante el gobierno de Salinas de Gortari, el gobernador que estaba (en Tabasco) pues no defendió adecuadamente lo que por derecho le correspondía al estado y cambiaron la fórmula, y afectaron a Tabasco y afectaron a Campeche, a los estados productores de petróleo; y últimamente, que volvieron a cambiar la fórmula, le dieron más a una entidad y les quitaron a otras. Entonces, yo no puedo. Ah, ¿cómo le hicieron para convencer a los gobernadores aquellos que iban a recibir menos? Pues entonces estaba en su apogeo el autoritarismo, que era levantar el teléfono rojo y ya. Pero ahora no es así".

Además les puso una limitante, "¿qué es lo que no se puede?, transferirles más dinero porque la federación tiene que responder por compromisos adquiridos, hay que pagar el servicio de la deuda, de la enorme deuda que dejaron los gobiernos anteriores".

Es decir, convenzan a los que van a afectar con el cambio de fórmula que lo acepten, nada más no se metan con los recursos que yo tengo a mi libre disposición. Ante esto, todo apunta a que el próximo lunes 7 de septiembre, en la reunión de la Alianza Federalista que se celebrará en Chihuahua, la mayoría de los 12 gobernadores, o a lo mejor todos, den un paso al frente para no seguir siendo rehenes de la Conago.

La hoy Alianza tiene su origen en las reuniones que tenían desde hace varios años, para coordinarse ante la inseguridad que traspasaba los límites de sus estados, los gobernadores de Nuevo León, el independiente Jaime Rodríguez Calderón y de Tamaulipas el panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca. El 10 de julio del año pasado se les sumó el priista Miguel Riquelme, de Coahuila, y firmaron un Convenio de Colaboración en Materia de Seguridad en Ciudad Victoria, Tamaulipas.

Ya con este antecedente de éxito en la colaboración de los tres estados, el 19 de marzo realizaron la primera reunión de la Coordinación Noreste COVID-19 en la que buscaban compartir experiencias, tanto financieras como sanitarias, además de coordinar acciones para enfrentar la pandemia.

Otros gobernadores vieron con buenos ojos esté mecanismo de colaboración ante la contingencia y, poco a poco, se fueron integrando hasta ser el la actualidad 12, seis panistas (García Cabeza de Vaca, Tamaulipas; José Rosas Aispuro, Durango; Diego Shinué, Guanajuato; Javier Corral, Chihuahua; Martín Orozco, Aguascalientes y Francisco Domínguez, Querétaro); tres priistas (Miguel Riquelme, Coahuila; José Ignacio Peralta, Colima; y Juan Manuel Carreras, San Luis Potosí), uno de Movimiento Ciudadano (Enrique Alfaro, Jalisco), un perredista (Silvano Aureoles, Michocán) y un independiente (Jaime Rodríguez, Nuevo León).

¿Qué propuesta puede presentar la Alianza Federalista? De entrada, algo similar a la reforma que se hizo en 2007 a la Ley de Coordinación Fiscal: asegurar que salvo que el monto a repartir sea menor al de ese año, todos los estados recibirán siempre más. El esquema es muy sencillo: el monto a repartir se divide en dos partes; la primera es la misma cantidad del 2007 y se reparte igual que en ese año, el resto se distribuye en base a las nuevas reglas. Ningún estado pierde, en principio, pero puede dejar de ganar al distribuirse de manera diferente el excedente.

La premisa básica para cambiar la fórmula es muy sencilla, como se expresa en la cita al inicio de este artículo, para que el pastel crezca se necesita que los estados más productivos tengan acceso a más recursos, de no ser así el pastel va a crecer a menor ritmo o se va a hacer más pequeño. Por desgracia, este argumento es el mismo que se ha usado para tratar de convencer iníltilmente a López Obrador de que debe apoyarse al sector productivo que es el que genera empleos que acaban pagando impuestos que son con los que él mantiene sus programas sociales.

Sin duda que la gira de la semana pasada puede acabar significando el adiós a la Conago.

¡Hasta la próxima semana!

Artículos anteriores: mobilnews.mx/columnistas/edmundo-crespo-ruiz

¡Comparte con amigos y familiares!

Una decisión importante que los partidos políticos deben tomar en los próximos meses es definir si firmaran alianzas con otros institutos políticos o si van solos en las elecciones de 2021.
 
Por lo general las negociaciones para avanzar en la formación de una alianza deben llevarse a cabo con discreción, casi en secreto. Y no es que las alianzas sea un cto pecaminoso; la propia ley electoral las considera un derecho de los partidos. Pero los dogmáticos que militan en todos los institutos políticos no ven con buenos ojos que pueda haber arreglos con quienes consideran sus adversarios. Muchos de estos celosos militantes desconfían de las alianzas por considerarlas una traición a los principios. Piensan que las alianzas desdibujan la identidad doctrinaria que los define. Pero las élites que controlan los partidos tienden a privilegiar el pragmatismo sobre el idealismo. El criterio que orienta su actuación es muy simple: de lo que se trata es de ganar, no solo de competir. Para los tomadores de decisiones las alianzas son pieza clave para aumentar las posibilidades de éxito, tanto en la disputa por la gubernatura como en las diputaciones y alcaldías.
 
No hay que exprimirse los sesos para pronosticar que la lucha electoral del próximo año aquí en San Luis Potosí será entre bloques formados por distintos partidos políticos. Pero conseguir una alianza se convierte en un complicado reto para los dirigentes de los partidos políticos. Tienen que ponerse de acuerdo acerca de los mejores perfiles y escoger el método más funcional para la elección de los candidatos. Especialmente difícil es tomar la decisión acerca de quién debe ser el abanderado a la gubernatura. Cada partido cree tener al mejor gallo. No menos penoso es administrar el conflicto que puede ocasionar una alianza con apariencia de absurda. Los militantes de pura cepa y la opinión pública mastican como si fuera una piedra las alianzas raras.
 
Pero la política realmente existente (la realpolitik) se impone. No es descabellado que eventualmente PRI y MORENA pudieran entenderse y postular a un candidato a la gubernatura. Hay prospectos que embonarían bien en esta posibilidad. Juan Ramiro Robledo, por ejemplo. Es bien visto por los priistas y por la mayor parte de los morenos. Político capaz, con trayectoria y experiencia en el servicio público, muy cercano a los afectos del presidente López Obrador y al que Juan Manuel Carreras reconoce méritos y capacidad.
 
O bien, si el PRI negociara con el PAN, podría ocurrir que los dos aspirantes mejor posicionados en este momento, Xavier Nava y Octavio Pedroza, consigan pasar la aduana. Parece un extravío pero la posibilidad existe.
 
Una razón de peso que da viabilidad a estos escenarios es que el PRI con todo y que muchos no le dan posibilidades de ganar con un candidato propio, sigue contando poco más o menos con el 20% de los votos para ofrecerlos a un candidato de otro partido. Si se toma en cuenta que en la última elección de gobernador el vencedor ha conseguido el triunfo con menos de 5 puntos de diferencia respecto a su más cercano competidor, se puede valorar el rol de “partido bisagra” al que está involuntariamente predestinado en esta ocasión el PRI. Así que hay que dar seguimiento muy puntual a las negociaciones que ya han comenzado entre los dirigentes de los partidos políticos para dar nacimiento a las alianzas.
 
A propósito de Alianzas.
 
1.- Hace unos días (el 2 de septiembre) el dirigente estatal del PAN Juan Francisco Aguilar reconoció que las elecciones ya no se ganan solas, sino a través de alianzas partidistas. Reveló que ya tienen encuestas que aportan información sobre la viabilidad o no de ir en alianza con el PRI tanto a la gubernatura como en los municipios. Algo se está cocinando.
 
2-. En el mismo tema, ha trascendido que durante la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a San Luis Potosí, en el marco de la reunión de la CONAGO celebrada el pasado 19 de agosto, hubo una muy discreta reunión del primer mandatario con el magistrado Juan Ramiro Robledo. ¿De qué hablaron?
Desde luego no fue del clima o de las bellezas de la huasteca potosina. El tema principal, dicen los enterados, fue la sucesión gubernamental.

-  “No les voy a fallar, no se van a decepcionar, soy muy consciente de mi responsabilidad histórica, no quiero pasar a la historia como un mal presidente”. Andrés Manuel López Obrador.

 Año 2020.

Hoy primero de septiembre es un día para entregar cuentas a la nación. El jefe del Estado mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dará a conocer a través de su Segundo Informe de Gobierno el estado que guarda la administración pública del país. Así lo ordena el   artículo 69 de la Constitución. Este acontecimiento es uno de los ritos más sagrados de nuestra vida republicana. Es un ejercicio de rendición de cuentas en el que el presidente presenta ante el Congreso de la Unión un balance del gobierno.

El primero de septiembre sigue siendo  “El día del Presidente”. En esta fecha el inquilino de Palacio Nacional realiza un ejercicio de comunicación y propaganda política para argumentar con datos duros y un relato épico lo que ha hecho para cumplir con el mandato que los ciudadanos le dieron en las urnas.

López Obrador es un presidente con una enorme legitimidad de origen, 30 millones de votos lo llevaron al poder (el 53% del total de los votos emitidos). Esta fabulosa cascada de sufragios ha sido interpretada por el tabasqueño como una orden para emprender un “cambio de régimen”, es decir, una revolución pacífica e institucional que entierre al viejo régimen (el neoliberal).

Así que este día el presidente intentará convencernos de que el gobierno de la Cuarta Transformación avanza con paso firme para llevarnos a la Tierra Prometida, al Paraíso Terrenal.

Pero en una sociedad plural, desigual y contradictoria como la nuestra, la unanimidad no existe; hay oposición, desacuerdos y resistencias. Esto provoca frecuentes  choques y  conflictos. La “verdad oficial” no convence a todos.

La luna de miel que empezó aquel 1 de julio de 2018 decae. El bono democrático que recibió el presidente está disminuyendo. Los niveles de aprobación que tenía AMLO en sus primeros meses de gobierno y que llegaron a alcanzar el 80% hoy presentan una considerable depreciación que la ubican en porcentajes que un 59%. Pese a ello AMLO sigue siendo un presidente con un fuerte apoyo popular. Se le reconoce como un mandatario con gran habilidad para comunicar, carismático, incansable y con una gran capacidad para despertar la esperanza en millones de mexicanos. Un hombre que se comporta como un ángel guerrero que combate en una guerra santa contra la podredumbre de la política. Pero también es un ave de tempestades. Divide y escandaliza a la sociedad.

En dos años al frente del gobierno el balance de resultados es de luces y sombras. Se le aplaude su lucha contra la corrupción e impunidad, sus programas sociales en apoyo a la población más vulnerable (“Por el bien de todos, primero los pobres”); la política de austeridad que ha desterrado lujos y excesos en la alta burocracia (“no puede haber gobierno rico, con pueblo pobre”); la desaparición de la guardia pretoriana –el Estado Mayor presidencial-; la venta del Avión Presidencial, “que no tiene ni Obama”; los esfuerzos por mejorar el sistema de salud con la creación del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) que sustituyó al Seguro Popular. Aunque por otro lado se le critica por el mal manejo que ha hecho de la pandemia que ya ha dejado más de 64 mil muertos.

El ejercicio del poder está desgastando a López obrador. Se le reprocha a él y a su equipo la sistemática incapacidad para gestionar los problemas que más afectan al país. De manera especial su falta de resultados en materia de seguridad pública. En los dos años que lleva su gobierno 60,100 personas han sido víctimas de homicidio doloso. La estrategia de “abrazos y no balazos” no ha funcionado. La militarización de la seguridad pública no ha logrado detener los asesinatos, las desapariciones y el clima de inseguridad que vivimos día con día los mexicanos. Por otro lado la falta de crecimiento económico y la pérdida de empleos es otro punto en contra. López Obrador prometió un crecimiento anual del 4% del Producto Interno Bruto. No lo ha conseguido. México ha entrado en recesión, el crecimiento económico es igual a cero. No sólo no vamos a crecer este año sino que habrá decrecimiento (un menos 18%). En un año se perdieron un millón de empleos y 30 millones de mexicanos han caído en pobreza por ingresos. Pero además el presidente ha mantenido una constante confrontación con la clase empresarial, lo que ha provocado incertidumbre y desconfianza en los inversionistas. Así mismo muchos le critican su ataque y acoso a los órganos constitucionales autónomos. En especial los que han estado dirigidos al Instituto Nacional Electoral (INE).

Preocupa, finalmente, esa pulsión por concentrar el poder en la figura del primer mandatario y que se interpretada como un intento de restaurar la presidencia imperial.

Conclusión: Hoy es día de Informe Presidencial y es ocasión para dejar a un lado la autocomplacencia, ejercer la autocrítica, reconocer lo que ha fallado y corregir el rumbo.

 

 

- Los panistas quieren a uno de los suyos. Nava busca alianza interna con otros aspirantes.

- “Boris”, la gran revelación en la contienda interna. Sube, mientras los que puntean bajan.

- No le gustó a Ciudadanos Observando, el pago de factura de Carreras a Fernando Toranzo.

ONE OF US.- El proceso electoral interno en el Partido Acción Nacional (PAN), ni está escrito ni está definido o escriturado para nadie. Si Xavier Nava Palacios se sentía diez cuerpos delante de sus competidores, hoy comienza a dar signos de desesperación, a grado tal que pretende tentar a panistas como Sonia Mendoza Díaz a que se sumen a su causa, para mostrar un signo de falsa unidad y de liderazgo, muy lejos de detentar.

Los llamados “7 Magníficos”, Octavio Pedroza, Alejandro Lozano “Boris”, Marco Gama, Xavier Azuara, Rolando Hervert, Xavier Nava y Sonia Mendoza, no están para nada cerca de la ansiada unidad pretendida por Marko Cortés, líder nacional de Acción Nacional y aunque podría haber acuerdos por pares, entre iguales, la realidad es aplastante: los panistas quieren a uno de los suyos en la candidatura y no aceptarán advenedizos que sólo han usado al blanquiazul para escalar a puestos de poder, traicionando al Partido.

Las múltiples encuestas pagadas por Nava o grupos ligados a él, donde lo posicionan como el más conocido entre los pretendientes, no revelan el altísimo nivel de percepción negativa que tiene, por encima de sus iguales y eso, pesa mucho más que su conocimiento de nombre. La gente lo ubica con los peores calificativos y amén de uno que otro “mentadón”, lo menos que se lleva es el mote de inútil o inepto, por decir algunos.

Ahora, si bien en las tres encuestas mostradas por el Comité Ejecutivo Nacional en la reunión celebrada hace dos meses en la Ciudad de México, fueron al menos cuatro los nombres reiterados y que son los de mayor conocimiento: Xavier Nava, Octavio Pedroza, Alejandro Lozano y Marco Gama, el político panista con un crecimiento sostenido y exponencial en el menor tiempo posible, ha sido sin duda el joven empresario Alejandro “Boris” Lozano.

Y por si fuera poco, también se conoció en ese momento el sondeo de Consulta Mitofsky, que arrojó más o menos números similares, pero mismos actores e iguales posiciones en la tabla. Atrás se quedaron en los cuatro estudios demoscópicos, importantes nombres como el de Sonia Mendoza, Marco Gama, Rolando Hervert y Xavier Azuara, que pese a la larga trayectoria que poseen en materia política y militancia panista, no cuentan en este momento con el voto quienes mueven una elección.

Es lógico, que los punteros, que andaban sobre 15 a 25 puntos porcentuales de conocimiento, comiencen a bajar, por dos factores: uno, nadie va a alcanzar un 40 por ciento de posicionamiento de nombre y menos de intención del voto y dos, a su curva ascendente sólo le queda un camino: comenzar a bajar.

Lo interesante aquí es el rápido crecimiento de “Boris”, que se coló en tres meses como una verdadera opción para los militantes panistas -y hasta para los que no son de casa-, con un estilo diferente, ideas frescas, lejos del acartonamiento de los viejos políticos y, de los cuales, ya no quiere saber mucho la base electora.

Sus recorridos a pie, caminatas y trotes por comunidades indígenas y zonas serranas del Estado, el pernoctar en ejidos y núcleos campesinos, el sentarse a ras de suelo como uno más, en franco diálogo con piloncilleros, cafetaleros, productores de maíz, frijol, tomate y hasta jornaleros cañeros, arroja un viento de cambio tan ansiado en este tiempo covidoso.

Pronto comenzará el proceso electoral formal (30 de septiembre) y así, se van a ir acotando los tiempos políticos para cada partido y personaje. Más de uno tendrá que “morder el polvo”, porque el pastel no da para 7 bocas grandes y antojadizas.

La aventura panista comienza a salpicarse de cambios, ajustes y tormentas. Nada está dicho. Muy pronto, como barco a pique en altamar, el navegante ordenará tirar lastre para viajar ligero y llegar a puerto seguro, con tripulación suficiente, sin polizontes advenedizos ni amotinados que traicionen a su Capitán.

TUNDEN A DELIA.- La ex diputada local Delia Guerrero Coronado, asumió hace unas horas la titularidad de la Coordinación Regional de la Secretaría de Finanzas en la Zona Huasteca con sede en Valles. Sin duda, un pago de factura del gobernador Juan Manuel Carreras López a su antecesor Fernando Toranzo Fernández, en un cargo sin mucha proyección, con demasiados problemas y una congeladora impresionante para la ex legisladora federal.

Lo menos que le han dicho a Delia Guerrero, es que siempre ha estado en contra de la ciudadanía, al votar en tiempos del Presidente Enrique Peña Nieto a favor del gasolinazo, votó por mantener la tenencia, por elevar el impuesto sobre la nómina, el endeudamiento del Estado y hasta en aumentar las tarifas domésticas de agua potable.

Al vocero de Ciudadanos Observando, Guadalupe “Lupillo” González, no le cuadra el nombramiento y más porque fueron ellos quienes, precisamente, denunciaron legislaturas atrás el tráfico de influencias de la ex legisladora huasteca, cuando sembró de amigos y parentela la Auditoría Superior del Estado. Incluso, le consiguió empleo a su hijo, un chef profesional como responsable del tema de auditorías y otras tareas administrativas muy alejadas de su expertisse de gourmet y hasta somelier.

Por lo pronto, le exigen dé marcha atrás con ese nombramiento que lesiona el sentir ciudadano.
Sin embargo, vale la pena leer un poco más allá. A Delia Guerrero la acaban de sacar de la jugada política, cuando ella andaba armando cuadros y equipo para postularse a la Alcaldía de Ciudad Valles.

El PRI y el Gobernador, están comenzando a operar para “limpiar” el terreno en los municipios y perfilar gente afín a puestos clave, que tenga la menor cantidad de puntos negros, porque ya se dieron cuenta que la gente cobra caro las afrentas de años.

Y así, hay una larga lista de nombres que irán a puestos administrativos, y otros que saldrán de sus actuales y cómodas oficinas, para hacer talacha con overol y zapatos de minero, buscando el voto ciudadano, el cual están muy lejos de volver a tener.

GUADAÑAZOS

CONSEJERO Y ASESOR.- Fuerte rumor se corre en los grupos políticos, de que cierto consejero electoral, anda de huele moles ofreciéndose para venderse al mejor postor en su papel de asesor político-electoral para el incipiente proceso electoral 2020-2021… Se dice que el “angelito” cobra la friolera de 100 a 150 mil volovanes por piocha, a cambio de darles guía, análisis de escenarios, rutas críticas, coaching y otros tenebrosos análisis e incluso, hasta tiene el talento de orquestar entuertos legaloides para desbarrancar a cualquier aspirante, dejándolo fuera de la contienda… se sabe que hay dos aspirantes panistas en su lista de clientes, aunque también lo ubican como oferente ante Morena… nada sonso el Consejero ehh.

ATENTOS A JJRR.- Muchos dizque analistas de tres pesos, apuestan hasta los calzones diciendo que Esteban Moctezuma Barragán será “el bueno” a la gubernatura, cuando la mira del potosino está en la Presidencia de la República; otros bajan la tranca colocando al Delegado de Programas Federales Gabino Morales como el ungido, que en la pasada visita del Presidente López Obrador a San Luis Potosí, tuvo que ver desde gayola a su jefe, mientras se peleaba con sus corifeos que lo habían dejado abajo del templete; unos más dicen que Leonel Serrato, o que bien iría a la Alcaldía capitalina, pero no saben que donde podría ser llamado sería a una diputación federal… los que realmente le echan seso, saben perfectamente que el perfil de mayor calado y andamiaje político es el abogado Juan Ramiro Robledo Ruíz, uno de los ideólogos de Morena en su fundación y una gente cercana a los grandes asesores del tabasqueño que gobierna el País… Callado, sin aspavientos, sin escándalos, sin ruidos, Robledo Ruíz es hoy por hoy, el activo más elaborado que el grupo que manda en el Gobierno, tiene para postular en San Luis Potosí… Tiene trayectoria, capacidad, experiencia legislativa, política, administrativa, empresarial, jurista y es del nivel de políticos pensantes que le gustan al Presidente.

LE GRITARON Y FEO.- Un grupo de mujeres le gritó y feo al Alcalde Xavier Nava Palacios, en plena casa de pueblo, a quienes se negó a atender y a regañadientes y sobre la marcha, medio escuchó cuando iba de bajada en Palacio Municipal… en el borlote, Nava acusó de ser un grupo de mujeres pagadas por la Gallardía, cosa que las féminas negaron y hasta le exigieron aclaración… en medio del griterío y una que otra mentada de madre, los guaruras que cuidan al edil, por poco y se llevaron de refilón a dos “Doñas” hacia debajo de la escalera. La cosa no pasó a mayores, pero el ambiente político comienza a calentársele y muy feo al navista que sueña con ser Gobernador del San Luis de la Patria.

    

- El presidente López Obrador aceptó sin regateos la Agenda en SLP.

Hubo de todo. Fue un evento cargado de significados, de repercusiones políticas y de saldos a favor y en contra de los protagonistas. Nos estamos refiriendo a  la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO) celebrada el pasado 19 de agosto en la capital potosina.

A unos días de ocurrido el evento y ya sin la estridencia de los fuegos artificiales que ocasionó es importante analizar algunas estampas de lo ocurrido.

Empecemos por el contexto y los antecedentes que precedieron a la reunión.

Desde de marzo fue escalando un clima de tensión entre el presidente y los gobernadores.  Con motivo de la irrupción de la pandemia se vivieron momentos de desencuentro entre ambos. Algunos gobernadores se opusieron a las medidas tomadas por la Secretaria de Salud, en especial a las asociadas al uso de un Semáforo Epidemiológico. Al mismo tiempo como consecuencia de la parálisis económica que ocasionó la pandemia las finanzas gubernamentales entraron en quiebra.

Para enfrentar la pobreza presupuestal algunos gobernadores optaron por el endeudamiento y al mismo tiempo exigieron a la Federación un nuevo Pacto Fiscal para obtener un mejor reparto de los impuestos. Se formó incluso un bloque de gobernadores de oposición (la Alianza Federalista) que intentó convertirse en un contrapeso y grupo de presión contra el Presidente de la República.

Adicionalmente, al estallar el escándalo de corrupción por la presunta entrega de sobornos entregados por la empresa brasileña Odebrecht a panistas y priistas las tensiones subieron de tono.

En este ambiente de confrontación y ausencia de diálogo llega a la presidencia de la CONAGO el gobernador potosino Juan Manuel Carreras el 16 de julio.

AMLO y Carreras empiezan a cocinar un encuentro para superar diferencia.

La llegada de Juan Manuel Carreras a la presidencia de la CONAGO le vino como anillo al dedo al presidente de la república. El gobernador potosino y el tabasqueño se llevan bien y han logrado construir una relación respetuosa y funcional para sus respectivos intereses. Para AMLO, Carreras es un buen interlocutor con los gobernadores del país. López Obrador no quiere seguir tensando la cuerda con los mandatarios estatales así que pronto acordó con el mandatario potosino construir un espacio de convergencia, diálogo y acuerdo con ellos. La oportunidad más propicia se presentaría en la LIX reunión de la CONAGO que tendría lugar en la capital potosina el 19 de agosto.

Para Juan Manuel Carreras se presentaba una oportunidad de mostrar sus capacidades de operación política y de paso para consolidar su relación con el presidente. Así que Carreras se empleó a fondo, cabildeó y logró que todos los gobernadores aceptaran venir a San Luis Potosí  a dialogar con el presidente. Poco a poco se fue acordando la agenda del encuentro. El presidente López Obrador la aceptó sin regateos e incluso llegó a declarar a los medios de comunicación que no quería pleito sino acuerdos. Para reforzar esta postura el mandatario decidió hacerse acompañar de todo su gabinete legal y ampliado. Esta modalidad de trabajo convirtió a la reunión de la CONAGO en un diálogo de la República.

Llegó el día esperado y todo era expectación, temores y esperanzas.

Previo a la cumbre de los gobernadores se hicieron vaticinios de que aquello acabaría en un desastre. Pocos creían que la clase política se pondría de acuerdo. Y sin embargo ese miércoles 19 de agosto hubo un diálogo republicano que al final del día rindió buenos frutos.

Desde luego que no todo fue miel sobre hojuelas. Hubo manifestaciones de rechazo a la presencia del tabasqueño (AMLO: "vete ya"; "En SLP no te queremos"; "Fuera López”;  “Juicio político al genocida" y "cárcel a López").  En los alrededores del Centro de Convenciones se pudo observar lo mismo a defensores de la Sierra de San Miguelito que a telefonistas, ferrocarrileros o al grupo FRENAA; a normalistas egresados de escuelas privadas y hasta agricultores de Chihuahua hicieron el viaje desde aquella entidad para denunciar atropellos. Ese mismo día (19 de agosto) apareció un desplegado firmado por colegios y sociedades de medicina en el que se denunciaba la falta de personal médico y se exigía aumento de sueldo y  prestaciones en caso de contagio o muerte de los trabajadores de la salud que laboran en las áreas de atención a enfermos  de Covid. En fin, que la reunión estuvo acompañada de una vibrante presencia de opositores al presidente.

Final feliz. 

Sin embargo y a pesar de la estridencia opositora, en el interior del Centro de Convenciones  los gobernadores y el presidente de la república dialogaron y llegaron a acuerdos.

López Obrador ofreció la entrega de treinta y un mil millones de pesos a los estados para fortalecer sus finanzas y para que enfrentaran la crisis provocada por el Covid-19. Acordó también apoyos para fortalecer la infraestructura y renegociar las deudas estatales de las 32 entidades federativas a través de BANOBRAS. Para el caso de San Luis Potosí hubo el compromiso de terminar la carretera Valles- Tamazunchale y se pactó la terminación de la vía alterna para llegar a la Zona Industrial. 

Otro acuerdo importante fue la formación de un grupo de trabajo para elaborar una nueva Ley de Coordinación Fiscal que propicie una mejor distribución de los impuestos en favor de los estados de la república. También se anunciaron recursos para que los estados otorguen créditos a las pequeñas y medianas empresas. Así mismo se informó que habrá dinero ilimitado para combatir la pandemia y que los medicamentos y la vacuna contra el coronavirus, una vez que esté disponible, serán gratuitos para toda la población.

Puede afirmarse que la reunión de la CONAGO fue exitosa.