- Softbolistas tomaron campo municipal.
- Hombres las obligan a jugar en el sol.
El hartazgo tras diez años de ser obligadas a jugar softbol bajo el inclemente sol de la Huasteca llegó al límite ayer, cuando decenas de mujeres que practican este deporte protestaron en la unidad deportiva de Valles.
Con pancartas denunciaron a la dirigencia de la Liga Varonil de la Amistad, que encabeza Joel Rocha Mendez, por estar adueñada de los terrenos públicos, tanto así que encontraron el espacio cerrado con candado para impedirles jugar.
En repetidas ocasiones acudieron ante la dirección de Cultura Física y Deporte, a cargo de Miguel Jiménez Lárraga, pero el funcionario -aseguran- está al servicio de Rocha Méndez y apoya su decisión de negarles igualdad de condiciones en el espacio deportivo.
"Una década de jugar a las 3:00 de la tarde, porque los hombres necesitan las Unidades desocupadas para las 18:00 horas y ellos sí juegan sin sol, con alumbrado, mientras que nosotras tenemos que soportar temperaturas arriba de 45°", clamaron.
Cabe mencionar que la Liga Femenil de Valles está adherida a la Federación Mexicana de Softbol, ha organizado para este municipio al menos cinco torneos nacionales con asistencia de cientos de jugadoras de todo el país y al mismo tiempo representan al Estado en competencias nacionales cada año.
La agrupación que dirige Joel Rocha Mendez, es considerada "patito" porque este dirigente jamás ha querido integrarse a la federación pese al reclamo de sus jugadores, ávidos de acudir a eventos importantes en México.
"Nosotros no tenemos problema en que a las mujeres se les permita jugar en mejores horarios, y nos rolen en diferentes días, entendemos la necesidad de igualdad de género pero es algo que no decidimos como jugadores, sólo nos resta esperar que el presidente de nuestra Liga haga algo al respecto porque todos tenemos derecho a jugar" expresaron jugadores de los equipos varoniles.
Y es que ayer, a modo de revanchismo, el diligente de la Liga Varonil de la Amistad ordenó a uno de sus "colaboradores" cerrar con cadena y candado la Unidad número 1 para que las damas no pudieran jugar semifinales (tuvieron que entrar por una rendija) y al mismo tiempo roló juegos de hombres, a quienes mandó amenazar diciendo que el equipo que no ingresara al terreno de juego iba a perder el encuentro.
Por si eso fuera poco, Rocha Méndez ordenó empezar a cobrar la entrada al espacio público desde las 5:30 de la tarde, cuando había juegos femeniles y no varoniles, $10 pesos tuvieron que pagar los aficionados para que al final no se desarrollara el segundo juego, y les fue negada la devolución de su dinero a por lo menos cincuenta personas.
"Queremos que venga a dar la cara, que también acuda el director del deporte Miguel Jiménez y nos diga porqué los horarios son decididos por una persona que no es dueño, y también el motivo para que se nos niegue usar el alumbrado público", pidieron las manifestantes.
Aunque el público aficionado, jugadores de la liga varonil y las inconformes, pidieron a gritos encender las lámparas para que desarrollaran el encuentro, el encargado, de nombre Plácido, cerró con otro candado el lugar donde se encuentra el interruptor.
Aficionados y jugadores abandonaron el campo cerca de la media noche, jamás llegó autoridad alguna, mucho menos el dirigente deportivo -quien de hecho no practica softbol y administra el negocio de venta de cerveza al interior- "la lucha no acabará hasta lograr igualdad de condiciones, y pedimos a autoridades superiores que pongan remedio si el Ayuntamiento no puede", expresaron las deportistas.
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